Financiar libros es una meta posible fraccionando pagos pendientes. A veces, llegan todos los gastos de golpe. Ante esta situación, cuesta pensar cómo conseguir el dinero. Te daré unos consejos para que puedas financiar libros fraccionando pagos pendientes.

Apunta todos tus gastos del mes

El primer paso para financiar libros sin renunciar a tu nivel de vida es ser consciente de todos los gastos. Visualiza cada gasto como si fuera una deuda y apunta a conciencia cada una de ellas. En esta página puedes descargar plantillas para llevar las cuentas.

A continuación, haz lo mismo con las fuentes de ingresos. Es decir, las herramientas de las que dispones para suprimir esas deudas. No solo tu actividad principal o las regalías de tus libros, sino cualquier habilidad que tengas y que pueda reportarte ingresos.

Ordena los gastos pendientes

En finanzas, se utiliza un método muy eficaz para eliminar deudas. Se ordena de menor a mayor cuantía las deudas y se eliminan una a una. Empezando siempre por la más pequeña, aunque suponga ignorar el resto temporalmente.

Esto se debe a que eliminar una deuda aumenta la efectividad para abarcar las demás. Tus acciones se focalizan y el optimismo aumenta gracias a ello.

Sin embargo, queremos solventar gastos recurrentes con plazos fijos de cobro. Financiar libros supone un pago constante, así como otros gastos básicos, como los domiciliados en tu cuenta personal. Si no quieres dejar a deber nada y evitar recargos, puedes hacerlo fraccionando pagos por fechas.

Prioriza ciertos gastos para financiar libros

Habrá muchos tipos de gastos en tu cuenta corriente. Si has publicado un libro tendrás gastos de publicación, marketing y eventos. Estos pagos pueden transformarse en gastos rentables con facilidad. En finanzas, un gasto rentable recibe el nombre de inversión.

En mi caso, tuve que hacer frente a varios pagos con apenas unos días de margen entre ellos. Siendo la publicación de mi novela el más cuantioso, los consejos convencionales me harían pagarlo el último.

No obstante, pagarlo el primero te reportará otra herramienta para financiar libros. Así como hacer frente a los pagos recurrentes de tu hogar. Si vas a apostar por alguien, ¡Apuesta por ti!

Usa métodos convencionales de recaudación

Las acciones más simples son las que mejor funcionan. Si tienes pagos que deben pagarse en un plazo muy corto, puedes vender algo que no uses para conseguir el efectivo.

Otra opción es obtener trabajos esporádicos como participar en algún evento como control de acceso, camarero, etc… Algo que no absorba mucho tiempo. También puedes usar alguna de tus habilidades para reportarte ingresos. Cosas pequeñas como montar un mueble, hacer la compra o pintar una habitación a otra persona.

La última opción es pedir dinero prestado. Quizá no sea lo más heroico, pero a veces las cosas pueden complicarse mucho. Solo asegúrate de devolver el dinero lo antes posible apoyándote en las mismas herramientas que usas para financiar libros.

Mi experiencia personal al financiar libros 

En mi caso, tuve un gasto extraordinario de 250 euros. No contaba con ello ese mes y mi cuenta bancaria solo podía hacer frente a los gastos domésticos.

Ese gasto extraordinario era la publicación de la tercera parte de Bajo el mismo sol. ¿Se trataba de un gasto o una inversión? Yo tenía clara la respuesta.

Así que liquidé los encargos de un cliente antes de tiempo. Tras cobrar el dinero, pague mi novela. Con una inversión hecha, enfoque mi esfuerzo en el resto de mis objetivos.

No ignores la señal de stop

Si usas este truco una sola vez, no sucede gran cosa. Pero si son recurrentes en tu vida, son indicativo de un problema mayor. Si vas asfixiado con los pagos y nunca llegas de forma holgada al final de mes, tus financias no están saneadas.

Realiza un balance de tus ingresos y gastos de manera inmediata. Ahorra dinero al inicio y si tras los gastos no sobra nada arréglalo. Solo tienes dos opciones: aumentar ingresos o reducir gastos.

Yo soy partidaria de optar por ambas cosas. Afina la estrategia de ventas de tus libros y aumenta los ingresos como escritor. Si, además, puedes deducirte algún gasto superfluo, hazlo. No ignores esta señal de stop si quieres financiar libros con éxito.

 

¿Cuántas veces has tenido que elegir entre tus libros y pagar los gastos de tu casa? Cuéntame tu experiencia. Si no quieres perderte más consejos para escritores, que no se te olvide apuntarte al Newsletter. ¡Qué tengas una semana de novela!